1956
A nuestro padre le decían "El Chino Richard". Cuando construyó nuestro chalet en Punta Gorda, Cienfuegos, le puso "Korea", con "K". Había un refrán en Cuba que decía: "Los chinos... pa'Corea". Nuestra Korea fue fundada en 1956 cuando María Conchita tenía un año. La vivimos hasta agosto de 1961 cuando nos fuimos de Cuba para siempre.
El Chino Richard
Korea fue diseñada por el arquitecto Mariano Ledón, tío político de nuestro padre, casado con una de las hermanas de Carmelina. Al llegar "La Revolución Cubana" la abandonamos a su suerte y fue vivienda de muchos comunistas, comenzando por el Dr. Longoria y su esposa. Luego fue asignada a un diplomático soviético y por último pasó a las manos de un tal Jorge Piñeiro de quien se dice había sido un sicario castrista en Cienfuegos. Piñeiro la convirtió en un hostal bajo su nombre: "Casa Piñeiro". En el año 2000 nuestro padre la visitó y fue muy bien atendido por su nuevo "dueño", a quien nuestro padre - en uno de sus videos - acusó de usurpador.
La dirección actual de nuestra casa es 1402 Calle 41, Cienfuegos, Cuba. Según nuestro padre para el año 2000 se mantenía muy bien. Los pinos que vemos en la foto de arriba fueron traídos en 1956 desde Varadero y era el orgullo de mis padres. La propiedad - de una manzana completa - estaba rodeada por estos pinos. Cuando Korea fue habitado por el diplomático soviético los pinos fueron podados por motivos de seguridad. Afortunadamente crecieron y llegaron a su tamaño original.
Cuando nació María Conchita - la única hembra - nuestro padre compró una camarita de películas silentes de 8mm. A partir de entonces comenzó la tradición de las películas que luego se convirtieron a video.
Korea
1er cumpleaños de María Conchita
Como la camarita de 8mm de nuestro padre no tenía banda sonora había que expresarlo todo facialmente. Aquí vemos a nuestro hermano mayor, "Richín" (Ricardo José Roberto), cuando cumplió 8 años el 26 de mayo de 1956.
María Peláez, llamada por su familia "La Abuelita Doña María", era la matriarca de sus descendientes, que eran muchos. Era viuda de Don Ricardo García, asturiano que llegó a Cuba durante la colonia. El matrimonio García-Peláez tuvo tres varones y cinco hembras una de las cuales fue nuestra abuela Carmelina (Carmen Justina, nacida en Santa Clara el 13 de abril de 1891). En su casa natal de Santa Clara (entonces provincia de Las Villas), celebrábamos las Navidades y su cumpleaños. Nosotros - mi hermano, hermana y yo - no alcanzamos a conocer a Don Ricardo.
Doña María era muy devota y sus cumpleaños comenzaban en la Iglesia de La Pastora en la Calle Cuba de Santa Clara, en el mero Centro Histórico de la ciudad, a poca distancia de la casa de los García-Peláez, donde La Abuela tenía un reclinatorio privado. La iglesia fue fundada en 1823. Doña María había nacido en 1866 cuando Cuba era parte de España y murió a los 95 años en 1961 cuando llevábamos pocos meses exiliados en Caracas, Venezuela. Su muerte me dolió muchísimo.
En Punta Gorda, de vez en cuando montábamos caballo. En el video vemos a uno de nuestros mejores amigos, Armandito García Insausti, quien tenía un caballo moro muy bonito. Armandito, desgraciadamente, murió joven en su exilio de un tumor cerebral.
Fui yo quien se percató de los primeros pasos de nuestra hermanita mientras salía hacia el jardín posterior de Korea. Le grité a nuestro padre quien tomó la camarita silente y le tomó el video para la posteridad. Pocos días después cumplía su primer año de vida.
En la estación de TV - la CMQ - de La Habana había un payaso muy popular llamado "Torombolo", como se le llamaba en Cuba a todos los individuos alocados, como supuestamente era yo. Nuestra adorada abuela Petra (madre de nuestra madre), que cosía muy bien, me hizo un disfraz de "Torombolo" que me lo terminé quitando cuando ya no quedaba de él ni los hilos.
Nuestro padre resultó ser un gran ciclista maromero. Aquí estoy con nuestros padres, frente a la fachada lateral de Korea, montando bicicleta. Del otro lado de la calle quedaba la casa de Marcelo Arroyo, quien en su exilio de Puerto Rico llegó a ser un magnate. En el video se pueden ver los pinos de Varadero recién plantados.
Yo mangoneaba a María Conchita como si fuera una muñeca de trapo. Me cuentan que cuando llegaba del colegio le gritaba: "¡hermanitaaaaaa!". La niña llegó a sufrir emotivamente por mis gritos. Cuando comenzó a hablar, le enseñé malas palabras, lo que me costó una "tunda de cintos" y varios días "detenido" en mi cuarto.
Cuentan que nuestra madre fue una de las mujeres más bellas y elegantes de Cienfuegos. Aquí la vemos mostrando a su nueva niña en el muelle del Cienfuegos Yacht Club.
El Cienfuegos Yacht Club (que ahora se llama "Club Cienfuegos") era nuestro segundo hogar. Llegábamos del colegio y en bicicleta nos íbamos al club que quedaba a pocas cuadras. Todas las mañanas (con frío o sin frío), antes de tomar el autobús del colegio, nuestra madre nos llevaba al club para entrenarnos. Llegué a romper record nacional en 25 mts estilo pecho.
Cuentan que la Bahía de Cienfuegos era la más bella de Cuba. La navegué muchísimas veces con las pequeñas embarcaciones que estaban a la disposición de los socios. Todavía recuerdo el olor del mar, temprano en la mañana, cuando remaba por sus aguas.
Comments
Post a Comment