Otaiza & Pérez
Existen muchas maneras de sacarle provecho a la inmensa desgracia del pueblo venezolano, como las que existió en torno a la inmensa desgracia del pueblo cubano, en lo que mi difunto padre - QEPD - llamaba "La Industria de la Contrarrevolución".
Están los miserables "vendedores de humo", sobre los cuales hablé detalladamente en mi publicación del 19 de agosto de este año (2025) titulada "Los Vendedores de Humo". Luego, el 7 de noviembre de este año, publiqué la buena noticia con una publicación titulada "Se Disipa el Humo".
Hay quienes venden humo y falsas esperanzas, como aquellos apátridas sinvergüenzas que promovieron una maroma llamada "Ya Casi Venezuela".